sábado, 26 de junio de 2010

Esperando por ti




Belisario querido: Me quedé muy preocupada por la caída tuya del Rosendo, como estas?? No supe mas nada de vos desde hace un montón de días, podes caminar? Me imagino que para ir a 18km estarás imposibilitado, o si no, no se qué pensar si es que me estas leyendo o no. Igual como vos bien dijiste "yerba mala nunca muere" así que me quiero imaginar que estas otra vez en el ruedo, aunque no vamos a seguir aclarando mala no es la yerba sino es que la usa para mal.

Te cuento que acá ya pasó otra fiesta patria, el día de la bandera. Para ese día las mamás de la escuela hicieron una bandera gigante toda con pedacitos de telas celestes y blancas, una belleza entre tanto cielo no sabés con cuanta emoción la veían flamear, y otra vez cantaron los gurises, son unos fanáticos de cantar, creo que vienen a la escuela solo por eso.

Yo siempre extrañándote, hay uno chiquito que me recuerda tanto a vos, me acuerdo cuando fuimos a primer grado, yo siempre una grandulona al lado de tantos changuitos bajitos, cuando entramos a primero yo ya tenia 9, me daba una vergüenza… pero bueno los tatas no se dieron cuenta que me tenían que mandar a la escuela hasta que vos no tuviste edad escolar, y por suerte que estabas vos porque si no capaz que ni iba a la escuela yo.

Me acuerdo perfectamente el día que ellos me adoptaron, vos eras un gurisito puro rulos de dos añitos, no supiste nada hasta ya grande cual era mi historia, nunca entendías por qué yo tenía el apellido Beltrán y vos Escalada. Después nacieron los otros nueve Escalada, y sí, me tuvieron como una verdadera hija, como una verdadera hermana, pero había cosas que no se daban cuenta por ignorancia, re buena gente, no me quejo.

Bueno en esos tiempos de colegio siempre eras remolón, no te gustaba ni un poquito tocar los cuadernos, siempre alguien te hacía toda la tarea y así engañábamos bien a la maestra, pobre la señorita Eulogia, era re chicata y no se daba cuenta que tu cuaderno y el mío tenían la misma letra!

Y bueno, veo que seguís igual mi alma, alejado de la escritura, y eso me trae a la cabeza un refrán, que si lo habrás dicho en los fogones para embromar a alguno!

“Al que nace barrigón es al ñudo que lo fajen” No cambias nunca paisano mío, pero igual te amé, te amo y te amaré mientras Diosito me de vida…

Sigo esperándote.


Ermelinda Beltrán



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